Si presentamos una declaración y después, sin haber sido requerido por Hacienda, nos damos cuenta de que se ingresó menos importe del debido, debemos presentar una declaración complementaria. En este caso la Agencia Tributaria nos exigirá un recargo por presentación fuera de plazo, siendo:
El 5%, 10% o 15% del importe dejado de ingresar si el ingreso se efectúa dentro de los 3, 6 o 12 meses siguientes a la fecha en que debería de haberse realizado respectivamente.
Estos recargos sólo recaen sobre la cuantía no ingresada. Hacienda nos puede exigir intereses de demora por los días transcurridos entre la fecha en que se debería de haber pagado y la fecha efectiva.